Hay que ver cuánta gente cursi anda dando vueltas por ahí. O al menos, gente que hace comentarios cursis. Gente que, con tales comentarios, parece querer decir: "miráme, soy especial" o "¿Ya te diste cuenta de que yo hago tal cosa de manera estupenda o a mí me suceden hechos que a lo demás (pobrecitos ellos) no le suceden?"
Esto claro, una lo nota más en el "ambiente" de las redes sociales, como por ejemplo el Facebook. Ejemplo: las mujeres que ya están casadas (hombres también aunque son los menos), parecen gozar mucho de escribir en sus muros lo felices que son con sus cónyuges (como si una acaso lo dudara, pues si por eso se casaron ¿o no?), lo obedientes que son sus hijos, la cantidad magistral de ropa que lavaron ese determinado día, la comida que van a preparar para la cena, el paso a paso de la preparación del día previo al día de reposo, los mates que le ceba su adorado príncipe, el beso de media hora que su pareja le dio y que demuestra todo el amor eterno que se tienen, etc. como que tuvieran que rendirle una especie de reporte a esa red social o sólo para que los demás puedan ver cuán maravillosas son como amas de casas, esposas, madres y de cuán espectaculares son sus vidas después de todo. Nadie duda de esto. Ahora ¿por qué ellas se afanan en postear cada tarea que llevan a cabo? ¿De quiénes quieren recibir aceptación? Claro, obvio, de los "miembros" de su cuenta, si no ¿de quién más? El tema sería ¿quién necesita recibir aceptación de cada cosa que una realice durante su vida? En fin...
Algunas personas adornan sus muros ilustrando la preparación de su corazón para participar de cierta actividad religiosa al siguiente día . Y nuevamente me pregunto: ¿Cuál es la razón? Porque para mí sería algo así como que esa noche me voy a tomar un helado y entonces escribo para que los demás se enteren algo como lo siguiente: "Preparando mi aparato digestivo para gozar de un exquisito helado esta noche" (???) Silencio absoluto. Y digo yo: ¿¿¿¿Y QUÉ?????? ¿A quién le importa? Y si estás preparando tus tripas para atragantarte con una crema helada, pues muy bien, sigue con tu vida, deléitate con dicha actividad y cierra el pico!!
¿Es acaso esto necesidad de aprobación? ¿Deseos de ser admirada (por no decir envidiada)? ¿Ganas de reafirmar aquello en lo cual una ya no siente mucha seguridad? ¿Anhelo de que los demás se enteren de qué buena vida estoy teniendo? ¿Algún dejo de maldad encubierta al querer restregar a alguien en particular su buen pasar?
¿Acaso alguien repara en que cuando se es simplemente feliz, y que si bien quiere compartir con todos esa felicidad de la que está siendo protagonista, una guarda esa felicidad en su corazón, en su memoria, en su mente deseando que nunca se escape, agradeciendo al cielo por tan bendita dicha, rogando a lo Alto que perdure por mucho tiempo y que a veces ni falta hace comentarlo porque cuando uno es ciertamente feliz, los demás lo perciben?
Cómo sea, me gustaría mucho poder enterarme de cosas que TAMBIÉN nos hacen ser humanos: el dolor, el hambre, la falta de empleo, la soledad (aunque estés con gente alrededor), el miedo, la enfermedad, el fracaso, la falta de fe, el abandono, la separación, la muerte y otras tantas situaciones como estas que hasta el más especial de los hijos de Dios padecemos a lo largo de nuestra vida, porque de eso también se trata la vida. Pero no. De eso no se habla ¿Cómo se me ocurre? No vaya a ser que los demás se den cuenta de que, después de todo, no soy tan especial, de que, al fin y al cabo, soy igual a todos los demás, soy común, soy humano, simplemente una persona.
Al diablo con la "careteada".
